Recuerdo con nostalgia las vacaciones de mi infancia con la familia.
Los cuatro (mi padre, mi madre, mi hermana y un servidor) metidos en un Seat 124 rumbo casi siempre a un pueblo cercano a Balaguer.
En aquellos tiempos de principios de los 80, salir de vacaciones con el coche era toda una aventura. Llenábamos el coche de trastos y comida hasta los topes en ese entrañable 124, que no corría mucho, pero nos servía como transporte al pueblo y nos creíamos los más felices del mundo.
Siempre hacíamos la parada en la Panadella (Cervera), una conocida estación de servicio de autopista, a comer el clásico bocadillo de jamón y un refresco. Mi madre, como buena madre, lo tenía todo preparado para cualquier imprevisto que pudiera surgir y mi padre "Miky" estaba contento de olvidarse de su trabajo de panadero y encontrarse con sus padres y hermanos.
Ahora han pasado más de 25 años, mi hermana está casada, mis padres ya son mayores y siempre tienen pequeñas molestias. Y un servidor, soltero de profesión, sigue parando en aquella estación de servicio de la Panadella, aunque para ir a otro destino, normalmente Andorra La Vella.
Son otros tiempos, los del estress ,las prisas y las nuevas tecnologías.
Bona Semana santa a tothom
Los cuatro (mi padre, mi madre, mi hermana y un servidor) metidos en un Seat 124 rumbo casi siempre a un pueblo cercano a Balaguer.
En aquellos tiempos de principios de los 80, salir de vacaciones con el coche era toda una aventura. Llenábamos el coche de trastos y comida hasta los topes en ese entrañable 124, que no corría mucho, pero nos servía como transporte al pueblo y nos creíamos los más felices del mundo.
Siempre hacíamos la parada en la Panadella (Cervera), una conocida estación de servicio de autopista, a comer el clásico bocadillo de jamón y un refresco. Mi madre, como buena madre, lo tenía todo preparado para cualquier imprevisto que pudiera surgir y mi padre "Miky" estaba contento de olvidarse de su trabajo de panadero y encontrarse con sus padres y hermanos.
Ahora han pasado más de 25 años, mi hermana está casada, mis padres ya son mayores y siempre tienen pequeñas molestias. Y un servidor, soltero de profesión, sigue parando en aquella estación de servicio de la Panadella, aunque para ir a otro destino, normalmente Andorra La Vella.
Son otros tiempos, los del estress ,las prisas y las nuevas tecnologías.
Bona Semana santa a tothom
2 comentarios:
Un gran relato, Bona Setmana Santa
Benvolgut Manel,
m' has fet recordar la parada típica de la Panedella, i sobretot, el pa de pessic de la Panedella!!
Petits moments però que a l' hora són els millors moments. Senzills, familiars, amb estima. Ara ens cal no anar tan de pressa,aturar-nos i també buscar aquella felicitat tan simple però la més autèntica.
Bon escrit. Felicitats !
Alba.
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