Los que me conocen de verdad, saben que siento una especial devoción por la Final Four. Esta competición, importada a imagen y semejanza de la liga universitaria de Estados Unidos, nació en 1988 con la primera Final Four que se celebró en la ciudad belga de Gante.
Si la memoria no me falla, creo que el FC Barcelona ha disputado 10 Final Fours, un auténtico éxito que sin embargo sólo nos ha comportado un título. Es una auténtica competición maldita para los colores blaugrana y los nombres de la Jugoplastika, Panathinaikos o CSKA Moscú han dado buena cuenta de los catalanes.
Que ha fallado ¿
Sinceramente, creo que un problema de debilidad mental. Ha faltado un entrenador que arrastre la presión hacia si mismo y se la quite a los jugadores. Aito García Reneses nunca consiguió quitarle la presión y ansiedad a Epi o a Solozabal. Lo mismo paso con Malkjovic. Y ahora ha pasado con Xavi Pascual.
La clave es fichar a un entrenador ganador, tipo Ettore Messina o Zelko Obradovic. De lo contrario, aunque fichemos grandes jugadores, acabaremos consolando a la afición después de nuevas derrotas.
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